Cómo cuidar un geranio
Hoy me gustaría hablarte de cómo cuidar un geranio.
Es mucho más fácil de lo que crees y podrás hacerlo siempre que quieras, considerando todo lo que te hará falta poner en marcha, para disfrutar de unas plantas bonitas y con mucha vida.
Normalmente, tendrás que tener en cuenta que los geranios florecen en la temporada de verano, aunque habrá otros que lo harán en primavera, dependiendo de la clase que sean. Suelen ser plantas pequeñas, que podrás manejar de manera fácil sin la necesidad de tener a tu alcance ninguna herramienta costosa o difícil de encontrar.
Otro de los rasgos que hacen que el geranio sea una de las plantas preferidas por todos, es que es perenne. Se adecua fácilmente a cualquier temperatura y resiste tanto el calor extremo como las grandes heladas.
Comienza eligiendo una maceta con agujeros de drenaje que se adecue al tamaño original del geranio, después, coloca grava. Solo un poco. Lo suficiente para que las raíces no se pudran con un exceso de agua. Después coloca sustrato o tierra especial para este tipo de planta.
El siguiente paso será plantar el esqueje. Coloca la planta en un lugar en el que le den al menos ¼ del día de sol, y que este no sea demasiado intenso. No los dejes abandonados en los días que haya más sol. Riega al menos 3 veces por semana, observando cuando la tierra comienza a secarse. Para humedecerla de nuevo. Hay muchas personas que abonan las plantas con fertilizante al menos un par de veces al mes.
Puedes dejarlos fuera, pasándolos al jardín en el momento de la primavera, protegiéndolos del exterior en las épocas de más frío del invierno.
Aprovecha el otoño para realizar la poda y así crear una planta mucho más saludable. Al igual que esto es importante retirar las hojas mustias así como las flores que se van marchitando. Podrás podar hasta dejar 1/3 de la planta sana.